La juntista, integrante de la Coalición Cívica –ARI, realizó un balance del trabajo realizado por la Comuna en 2017, donde destacó la recuperación de espacios públicos, y remarcó la importancia de buscar siempre la participación vecinal.
Desde Nadie Nos Invitó continuamos con la serie de entrevistas que buscan realizar un balance de lo actuado en 2017 a fin de poder proyectar los ejes de trabajo en la comuna durante este año.
En esta oportunidad conversamos con la juntista Daniela Mesplede, integrante de la Colación Cívica-ARI, espacio que en la Ciudad conduce la legisladora Paula Oliveto Lago y que en las últimas elecciones logró la incorporación al parlamento porteño de Claudio Cingolani, legislador que trabajará coordinadamente con Mesplede en proyectos vinculados a la Comuna 10, para conocer su mirada sobre lo actuado y sus objetivos para 2018.
NNI: ¿Qué balance hacés del trabajo realizo por la Junta Comunal en 2017?
D.M: Nosotros asumimos en 2015 y en estos dos años se han logrado avances muy notorios. Ha sido bastante maratónico el trabajo en conjunto de toda la Junta Comunal, en principio en lo que fue la recuperación de varios predios.
Uno de los más emblemáticos es el del Corralón de Floresta. Este predio estuvo ocupado indebidamente por más de 20 años, lapso en el que se generaron todo tipo de problemas entre los frentistas linderos a ese predio y los ocupantes. Luego de varias negociaciones y de llegar a un acuerdo se proyectó la tan deseada Plaza de los sueños, como le dicen los vecinos, y hoy se está construyendo esta plaza cultural y deportiva, que va a llevar un largo año de trabajo
Lo más importante de esto es que en este proyecto participaron los vecinos: se los escuchó, se hicieron las audiencias públicas correspondientes en la Legislatura donde pudieron exponer sus opiniones, y de esa forma contribuyeron a la formación de este proyecto. Por eso digo que es un proyecto de los vecinos.
Justamente una de las cosas que nosotros desde la Junta Comunal criticamos, y criticamos para poder mejorar, es que las obras que se hacen dentro de una comuna y de un barrio, deben estar consensuadas mínimamente con la Junta, porque los juntistas somos de la comuna y conocemos los pros y los contras de algunas obras.
Por eso algunos proyectos trajeron inconvenientes con los vecinos, porque no están de acuerdo y algunas veces uno mismo ve que nos son del todo coherentes. Por ejemplo, yo soy partidaria de las ciclovías pero la ciclovía que está en uno de los laterales del Hospital Vélez Sarsfield, donde se necesita espacio para que entren y salgan ambulancias y que los vehículos puedan estacionar de emergencia, desde ya que me parece que es una locura y que ha sido planificada desde un escritorio y sin conocer el terreno.
Siguiendo con la recuperación de los espacios, otro importante fue el Paseo Guido Spano, que está ubicado en la subida de la Autopista 25 de mayo, en Rivadavia al 9600. El gran problema es que las familias que se instalaron allí fueron haciendo un asentamiento con cartón y después con chapa y materiales. Esto, más allá de lo estético y peligroso para los que pasaban caminando, se constituía en un problema porque obstruía la salida de emergencia del colegio Guido Spano. Por lo tanto hubo que hacer un desalojo que se realizó con la colaboración de acción social, fue pacifico y hoy quien pase por ahí va a ver que hay un lindo paseo y se recuperó la salida para el colegio.
Arbolado. Con respecto al arbolado, yo el año pasado integré estas comisión y lo primero que hicimos fue un diagnostico de especies y ejemplares con los que contaba la comuna. La comuna 10 es una de las que tiene mayor cantidad de ejemplares y algunos son muy añosos por eso el trabajo fue muy intenso. Hasta el momento se extrajeron 1600 ejemplares y se realizaron circuitos y corredores en lo que hace a la poda.
Lo cierto es que falta mucho por hacer y seguramente va a llevar un mandato completo dar vuelta la comuna en este aspecto.
Por otro lado, nos encontramos con un inconveniente que fue el amparo presentado por un grupo de vecinos defensores de la naturaleza y los aboles que, al darle lugar un juez, generó que desde hace cuatro meses no podamos tocar un solo ejemplar, ni siquiera una sola hoja. Por eso ahora, para realizar una extracción no alcanza el protocolo típico, que es pedir una resolución, sino que hay que hacer un pedido especial al juez para que nos habilite a tocar este ejemplar en cuestión.
Sabemos que los vecinos están preocupados y sabemos que están enojados porque no les ha llegado la poda y esto es importante comunicarlo porque no nos estamos justificando, estamos explicando que es lo que ocurre respecto a lo que hace al arbolado. Esperemos que esto se subsane, se levante el amparo y este año podamos continuar con el trabajo normal y habitual.
NNI: ¿Que objetivos y ejes de trabajo te proponés para este año?
DM: Uno de los proyectos más ambiciosos tiene que ver con el traslado de la sede comunal. Nosotros actualmente estamos alquilando el edificio de Bacacay y Sanabria, que nos queda chico ya que no tenemos las instalaciones ni los espacios adecuados para atender a la gente que se acerca de la comuna. Por eso se estuvo tratando de ver la posibilidad de trasladar la sede al predio de la ex Pepsi y de poder construir además un jardín maternal, que sabemos que es una necesidad prioritaria de nuestra comuna, y un CeSaC, para descomprimir al hospital Vélez Sarsfield.
En ese sentido, hace unas semanas estuvimos reunidos con la ministra de Salud de la Ciudad Ana María Bou Pérez con quien charlamos de este tema. También conversamos sobre el predio del Roca, ubicado en la calle Segurola, que sería interesante darle una utilidad para la comunidad y derribar esos paredones, cosa que los vecinos vienen pidiendo hace tiempo. La ministra se comprometió a un nuevo encuentro a fin de poder avanzar en este proyecto.