Alquilar un departamento de tres ambientes en la Ciudad cuesta 17,200 pesos a los que hay que sumarle un 25% de expensas y, según las últimas mediciones publicadas por la Dirección de Estadísticas y Censos del GCBA, el salario promedio en la Ciudad es de $18.400. “Hoy estamos en el punto más alto de incidencia del alquiler sobre los ingresos”, aseguró Fernando Muñoz a Nadie nos Invitó.
El Programa de Atención a Inquilinos de la Defensoría del Pueblo realizó el primer relevamiento integral del mercado de alquileres. El informe tuvo como base datos provistos por el portal de búsqueda de inmuebles Argenprop durante el mes de agosto y se analizaron unidades de 1, 2 y 3 ambientes ubicadas en los diez barrios con mayor oferta de departamentos en alquiler.
Uno de los resultados más relevantes es que el m² en alquiler alcanza los $282. Esto implica que un monoambiente tiene un valor promedio de $9.500, un departamento de dos ambientes se alquila en $12.000, mientras que las unidades de tres ambientes alcanzan los $17.200. Estos datos son especialmente importantes en una Ciudad en donde sus habitantes tienen un ingreso promedio de $18.400, según las últimas mediciones publicadas por la Dirección de Estadísticas y Censos del GCBA.
“Estos son los valores iniciales de un contrato de locación celebrado en agosto de 2018. Sin embargo, al tener una duración legal mínima de 24 meses, los contratos incluyen una cláusula de actualización”, asegura el informe que indica que, del total de anuncios relevados, el 77% establecen que los aumentos se realizan semestralmente y solo el 23% lo hacen anualmente. Quienes aumentan semestralmente lo hacen, en promedio, un 14,3% y quienes aumentan anualmente lo hacen, en promedio, un 30,68%.
En relación a las expensas, el valor promedio para el conjunto de los anuncios analizados es de $2940, siendo menor para los departamentos de un ambiente ($2250) y para los de dos ambientes ($2730) y mayor para los de tres ambientes ($3930). Es destacable que, en cualquiera de los casos, las expensas ya representan casi el 25% del precio del alquiler.
Consultado sobre el análisis de estos datos, Fernando Muñoz, titular del Programa de Atención a Inquilinos de la Defensoría del Pueblo, aseguró que “lo mas destacado de esta época es la incidencia que tiene el alquiler sobre los ingresos”, y abogó por algún tipo de control del mercado inmobiliario por parte de los legisladores porteños y nacionales.
El recordó que el primer debate legislativo sobre alquileres se realizó en 1920, finalizada la primera guerra mundial. “En ese tiempo se denunciaba que el 50% de los ingresos de un trabajador se destinaban a pagar una habitacional o un lugar de vivienda”, aseguro Muñoz a Nadie Nos Invitó- y en esa primera crisis del ´20 se legisló congelando y regulando los alquileres”.
Lo mismo sucedió al finalizar la década del ´30, donde ya en 1943 se decidió congelar los precios, y esta decisión se hizo ley en 1948 durante el primer gobierno de Perón. “Entre el 1920 y 1976 se legisló siempre para que el alquiler no superara el 25% de los ingresos familiares”, asegura Muñoz. “Luego vino el decreto ley de Videla, donde sobre todo a partir de 1978, se liberan de los precios de los alquileres y hoy estamos en el punto más alto de incidencia de los ingresos, con una población muy alta de inquilinos”.
En ese sentido, Muñoz resaltó que, formalmente, las personas con contratos de alquiler superan el 35% de la población de la Ciudad, a la que hay que sumarle personas que alquilan habitaciones, en hoteles, en viviendas familiares. “Es un mercado muy propio de la etapa preperonista, de alquilar una habitación en una casa de familia. Esto se esta dando también en las villas”, advierte Muñoz.
En ese sentido, la agrupación Inquilinos Agrupados exigió que la Cámara de Diputados le de tratamiento a la Ley de Alquileres que desde finales de 2016 ya tiene media sanción en Senadores y que traería cierto alivio para los millones de inquilinos en todo el país.
