En los últimos 12 años la población de la Comuna 10 creció un 3,4%, mientras que la cantidad de viviendas aumentó un 37,3%. Sin embargo, cada vez hay más inquilinos y menos propietarios.
Escribe: Alejandro Volkind
Esta semana el Indec dio a conocer datos preliminares del Censo realizado en 2022. La información refiere principalmente a cantidad de habitantes y de viviendas y, aunque escasa, permite comenzar a conocer las transformaciones que, en este caso, vienen aconteciendo en la Ciudad de Buenos Aires y en los barrios que integran la Comuna 10.
Habitantes
Respecto a su población, en los últimos 12 años la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sumó 230.461 habitantes, llegando a los 3.120.612 de residentes. El número representa un crecimiento del 7,97% respecto al censo realizado en 2010.
En la Comuna 10, la población es de 171.797 personas. Es decir, que en estos 12 años se incorporaron 5775 nuevos habitantes, tan sólo un crecimiento del 3,4%.
El número contrasta con los mas de 36 mil nuevos habitantes que tiene la Comuna 12 (Coghlan, Saavedra, Villa Urquiza y Villa Pueyrredón), donde su población creció un 18%.
Viviendas
En el mismo periodo, las viviendas pasaron de 61.453 a 84.382 , es decir, un crecimiento del 37,3%. En los últimos doce años se incorporaron 22.929 viviendas nuevas a la Comuna 10
Sin embargo, estos números no expresan una mayor cantidad de propietarios. Lo que crece en la Ciudad es el proceso de inquilinización.
En los últimos 20 años, la cantidad de familias habitan en una vivienda alquilada crece a un ritmo del 8% por década.
Por ejemplo, en la Ciudad de Buenos Aires, en el censo del año 2001, el porcentaje de familias inquilinas era del 22% (227.545 hogares). El censo del año 2010 indicó el 30% (343.443). En dicha década, los hogares inquilinos aumentaron en 115.898.
De acuerdo a la Encuesta Permanente de Hogares (INDEC), en 2017 el porcentaje de inquilinos subió al 38% en la ciudad, es decir, aproximadamente 437.000 hogares. Y aunque aún no se dieron a conocer los datos del censo 2022, se estima que el porcentaje de familias que alquilan en la Ciudad llega al 40%.
Inversamente, en el mismo periodo lo que fue disminuyendo fue la cantidad de propietarios en la Ciudad. En 2003, los propietarios alcanzaban el 64,4 % y en 2019 el 53,6%.
Democratizar la propiedad
Como plantea este artículo, urge democratizar y regular el mercado de alquileres, pero más urge democratizar la propiedad urbana. «Es hora de hablar de una gran Reforma Urbana partiendo de la función social y ecológica de la propiedad», aseguran Jonatan Baldiviezo y Ana Fernández Borsot. «Es tiempo de que cuando hablemos de igualdad con relación a la tierra claramente se entienda que hablamos de que todas/os seamos propietarias/os (de propiedades individuales, colectivas, comunitarias, etcétera). No debemos conformarnos con hablar del alquiler como el mínimo garantizado del derecho a la vivienda, sino que debemos discutir los topes al ejercicio de un derecho para así cuestionar la concentración de la propiedad de los inmuebles. Para terminar con la pobreza habitacional debemos discutir la igualdad de la propiedad urbana».
«No debemos renunciar a la lucha por la propiedad. No podemos ser verdaderamente ciudadanas/os si la ciudad no nos pertenece literalmente. La propiedad no es ajena al Derecho a la Ciudad, a la Democracia Participativa y a la soberanía del pueblo».
