Escribre Perla Natalia Castillo
Diversos colectivos que hacen a la educación pública vienen reclamando desde el comienzo del Aislamiento Preventivo Obligatorio, la creación de una Tarjeta Alimentaria y el acceso a internet para todas las niñas, niños y adolescentes. Esta semana comenzó a circular un documento con fundamentos y objetivos para asegurar condiciones de igualdad entre lxs estudiantes.
Desde que comenzó la cuarentena la sociedad pudo apreciar que las desigualdades eran reales y concretas, los diversos colectivos que hacen a la educación redoblaron la apuesta y le vienen reclamando al Gobierno de la Ciudad, al Ministerio de Educación y a la Legislatura, que se implementen planes que aseguren el cuidado de la salud de lxs estudiantes y docentes, así como también la democratización del acceso a internet y a la tecnología.
Hoy nadie puede asegurar que las realidades que habitan en cada familia es la misma que antes de la pandemia, es así como quienes van a escuela jornada completa reciben bolsones que aseguran algo de la canasta básica alimentaria, y quienes van a jornada simple sólo reciben alungas leches con galletitas.
Al mismo tiempo, a diferencia de las escuelas privadas que parten de la base de que todxs lxs estudiantes cuentan con acceso a la tecnología y a internet, pudiendo planificar sus clases con esa libertad, lxs docentes de la escuela pública no tienen la misma suerte porque saben perfectamente que la brecha de desigualdad en el acceso a internet y a la tecnología es enorme y es concreta.
Para poder saber y comprender un poco más sobre este tema, Nadie nos Invitó estuvo en entrevista con Mariano Fernández, integrante del Foro por la Educación Pública de la Comuna 10 y de la Multisectorial por la Educación Publica, para que nos cuente como surge la propuesta de la Tarjeta Alimentaria y que se espera con la elaboración y circulación de este documento.
Mariano nos cuenta que la idea de la tarjeta surge a comienzo de mayo, y que tiene que ver con una necesidad que surge al ver los inconvenientes que plantea la deficiencia de las Canastas Nutritivas entregadas por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que no cubren a todas las matrículas y que se les niegan a quienes no tienen beca.
Por otro lado, asegura Mariano, que no son para todos los niveles educativos, dejando afuera a lxs estudiantes de nivel terciario, bachilleratos para adulos y a estudiantes que se quedaron este año sin vacantes en la escuela pública.
Las Canastas Nutritivas Escolares se entregan cada quince días en las escuelas y se dividen entre desayuno y Refrigerio. Los desayunos ofrecen (dos litros de leche, galletitas, barritas de cereal, cinco saquitos de té y de mate cocido) mientras que, a los Refrigerio, que son las entregas que hacen en las escuelas Media de la Ciudad se les agregan cinco unidades de fruta.
Para Mariano Fernández, como para toda la comunidad Educativa y para toda la sociedad en su conjunto queda claro que estas entregas son insuficientes para lxs chicxs en edad escolar.
Por otro lado, a las escuelas que son de doble jornada y que tienen comedor, también se les entrega cada quince días una canasta con doce productos de alimentos no perecederos que tampoco son suficientes porque no llegan a cubrir más de dos o tres días de alimentación de lxs estudiantes.
En base a todas estas necesidades y después de hacer informes, elevar documentos y realizar quejas administrativas a la legislatura, se nos ocurrió la necesidad y la importancia de generar e implementar esta Tarjeta Alimentaria para poder llegar a todos los niveles educativos, así también para llegar a todos lxs estudiantes de CABA, con o sin becas. También reclamamos que la tarjeta llegue a lxs adultxs de los terciaros.
Esa es la base y la fundamentación de la necesidad de crear e impulsar la implementación de esta herramienta, con el fin de suplir la deficiencia en cantidad y calidad, así como también la No universalización del derecho a la Canasta Escolar Nutritiva que se vio reflejada en cada entrega, afirma Mariano.
¿Cuáles son los plazos que se estiman para saber si este proyecto será considerado?
Los plazos son urgentes, este viernes comenzaron las vacaciones de invierno en la ciudad y retoman las clases el 3 de agosto, es decir que durante estas dos semanas el Gobierno de la Ciudad no va a entregar ningún tipo de refrigerio a la comunidad. Por lo tanto, innumerables familias van a tener que esperar quince días o más para recibir algún tipo de soporte alimentario.
Lo que nosotrxs necesitamos y entendemos como plazo es que al retorno de las clases este proyecto ya esté en marcha para que se pueda implementar la tarjeta lo antes posible, porque esto no termina con la pandemia, ni con la cuarentena flexibilizada, ni con el levantamiento de la misma, porque van a ser miles de familias las que van a quedar en una situación compleja en materia económica y alimentaria, por lo que entendemos que la instrumentación de la tarjeta debe ser un derecho como soporte importante para la segunda mitad del año.
Por otro lado, cabe aclarar que Gobierno de la Ciudad no dio ningún tipo de soporte económico a las familias como hizo el Gobierno Nacional a través del IFE o con la ayuda a las PYMES y a las empresas.
¿Quiénes confeccionaron este documento y de quienes se espera respuesta acerca de este petitorio?
El documento se realizó entre cooperadoras de la Ciudad, Cuerpos de Delegados de CABA, colectivos organizados por la educación pública y organizaciones sociales.
Este documento comenzó a circular esta semana y la idea es que interpele al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y al Ministerio de Educación de la Ciudad en primera medida, así también como al oficialismo de Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad para que urgentemente comiencen a trabajar en esta herramienta tan necesaria. También a lxs legisladorxs, ya que hay un proyecto presentado por el Frente de Todos en la legislatura respecto a este tema que no ha sido tratado por el oficialismo, ni fue tenido en consideración.
Por eso, necesitamos que los propios legisladorxs de la oposición impulsen este proyecto y acompañen este aporte y reclamo que hacen los diferentes sectores de la ciudad que no pertenecen al arco de la legislatura, ni al gobierno porteño pero que la pelean día a día, semana a semana en las comunidades educativas para tratar de ayudar en este contexto.
Cabe destacar que muchas escuelas hicieron un refuerzo alimentario, en cada entrega de las Canastas Escolares Nutritivas, con recursos de las cooperadoras o donaciones.