Organizaciones barriales, sociales y de Derechos humanos de la Comuna 10 convocan a una nueva movilización que, como desde hace más de dos décadas, recuerda a las y los detenidos desaparecidos que pasaron por los tres Centros Clandestinos que funcionaron en Floresta. “En este contexto represivo y reivindicador de la dictadura, también es urgente exigir la continuidad de las Políticas Publicas de Memoria”, aseguran los organizadores.
Como desde hace más de dos décadas, este viernes 22 se realiza la Marcha Orletti-Olimpo para exigir Memoria, Verdad y Justicia, y recordar a las y los detenidos desaparecidos que pasaron por los tres Centros Clandestinos que funcionaron en Floresta.
El punto de encuentro será en San Nicolás y Rivadavia a las 18 hs. De allí se marchará hacia “Automotores Orletti”, ubicado en Venancio Flores 3519, lugar donde entre mayo y noviembre de 1976 funcionó un centro clandestino de detención tortura y exterminio durante la última dictadura militar por el que estuvieron secuestrados alrededor de 300 ciudadanos, la mayoría de los cuales continúan desaparecidos.
Imagen. Estudiantes de escuelas primarias de la Comuna, visitando y realizando actividades en el Espacio de Memoria ex Automotores Orletti. Hoy en día, el gobierno nacional está despidiendo a los trabajadores de los espacios de Memoria.
Luego la movilización pasará por diversos puntos entre los que se destacan el ex centro clandestino denominado El jardín, descubierto en 2020, el lugar en la Calle Corro al 100 donde les arrebataron la vida a Victoria Walsh (hija del periodista y escritor Rodolfo Walsh, también asesinado y desaparecido por la última dictadura), Alberto Molinas, José Beltrán, Ismael Salame y José Coronel.
También se recodará a las monjas francesas que fueron secuestradas y continúan desaparecidas Alice Domon y Léonie Duquet en la plazoleta que lleva sus nombres.
Imagen. Recorrido de la Marcha.
La movilización culminará el ex Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio Olimpo, ubicado en Ramón Falcón 4250, donde se leerá un documento de cierre.
El “Olimpo” funcionó como centro Clandestino entre el 16 de agosto de 1978 y fines de enero de 1979, y permanecieron cautivas aproximadamente 500 personas, de las cuales solo alrededor de 60 han logrado sobrevivir.
Imagen. Ex Centro Clandestino Olimpo, en Ramon Falcón 4250. «“Las pruebas materiales encontradas (en los ex centros Clandestinos), en base a los testimonios, fueron fundamentales para condenar a los represores en la justicia y para conocer la verdad de lo sucedido con los detenidos desaparecidos del cono sur de América Latina», indica Maggio.
De las torturas y la clandestinidad, a la Memoria y la verdad
Desde 2006, y luego de la lucha de todo el barrio, tanto Orletti como Olimpo son Espacios de Memoria abiertos al barrio y a la comunidad.
Ricardo Maggio, coordinador del Sitio de Memoria Automotores Orletti, cuenta la importancia de conservar estos espacios. “Las pruebas materiales encontradas (en los ex centros Clandestinos), en base a los testimonios, fueron fundamentales para condenar a los represores en la justicia y para conocer la verdad de lo sucedido con los detenidos desaparecidos del cono sur de América Latina».
«Desde el equipo de trabajo resignificamos diariamente este espacio como Sitio de Memoria y creemos necesario vincular lo sucedido aquí con nuestro presente. Para eso contamos con propuestas educativas y visitas guiadas para todos los niveles abiertas a la comunidad. En ellas tratamos de mantener viva la lucha de los detenidos desaparecidos y reflexionamos, entre otras cosas, sobre las marcas dejadas por la dictadura Cívico-Militar en nuestra sociedad”, asegura.
Por ello, advierte sobre las políticas de desguace del Estado que está implementando el gobierno nacional. “Existe la posibilidad real de cierre de los Espacios de Memoria producto del despido de los trabajadores que realizan sus tareas que son 63 personas para siete espacios de Memoria que dependen del gobierno nacional. La verdad que no es mucho; es más, faltan trabajadores para poder llevar adelante todas las tareas de conservación, preservación, investigación, talleres pedagógicos, visitas y actividades de gestión cultural que se realizan”.
Maggio también remarcó el contexto particular en el que se realizará la movilización de este año: «Esta marcha tiene que ser no solamente de reivindicación de las políticas de Memoria Verdad y Justicia, sino también el pensar hoy cómo están siendo avasallados todos los derechos«.
Comuna 10, comuna de la Memoria
La historia del barrio permite entender por qué, cada año, las banderas que exigen Memoria Verdad y Justicia se levantan con fuerza en nuestras calles y motorizan, desde hace más de dos décadas, la marcha que protagonizan los vecinos de Floresta, junto a organizaciones de Derechos Humanos, centros culturales y organizaciones políticas.
