El titular del Observatorio del Derecho a la Ciudad, Jonatan Baldiviezo, opinó sobre la concentración de este jueves en la Legislatura y la audiencia pública que se hará el vienes con más de 7 mil participantes.
La audiencia será las más multitudinaria en la historia de la Ciudad de Buenos Aires, con la inscripción de 7.044 vecinos y vecinas que buscarán fijar su posición, mayoritariamente de rechazo, al proyecto del gobierno porteño que propone avalar modificaciones a las normas urbanísticas de Costa Salguero y Punta Carrasco, algo que permitiría construcciones de torres de lujo, generando una barrera de cemento frente al Rio de la Plata.
“Es el festejo de la democracia participativa, un espacio de ejercicio de plano la ciudadanía”, detalló Baldiviezo en dialogo con la AcMV.
La iniciativa que se debatirá el viernes desde las 14, será virtual y cada participante contará con cinco minutos para dar su opinión sobre el proyecto del oficialismo. Está definido que, a medida que transcurran las horas, se pasará a un cuarto intermedio a los días subsiguientes, hasta culminar con la lista de oradores.
El rechazo vecinal comenzará a manifestarse este jueves, a las 18, con una concentración al rededor de la Legislatura porteña. “Será algo simbólico, frente al espacio donde se va a decidir”, señaló Baldiviezo.
La antesala a estos acontecimientos fueron los dichos de Felipe Miguel quien, en el marco de la presentación semestral del jefe de Gabinete de Ministros ante legisladoras y legisladores porteños, aseguró que “nuestros jefes son los vecinos de la Ciudad y nadie más”, dicho con la intención de reclamarle a la oposición que defienda los intereses de la Ciudad ante la quita de partidas dispuesta por el presidente Alberto Fernández.
Sin embargo, las expresiones del Jefe de Gabinete porteño parecieron no aplicar al tema que convocará a miles de expositoras y expositores este viernes y que, durante la visita del funcionario al parlamento, fuera motivo de requerimiento de varias voces opositoras.
La primera en poner sobre la mesa la cuestión, el pasado martes, fue la legisladora del Frente de Izquierda (FIT) Myriam Bregman, quien preguntó respecto del criterio que manejaba el Gobierno para “seguir avanzando con el proyecto de Costa Salguero, cuando la enorme mayoría del pueblo de la Ciudad está notoriamente en contra”.
Otra de las voces fue la del diputado del Frente de Todos (FdT) Leandro Santoro quien, en un encendido discurso, preguntó «hasta cuándo se va a beneficiar a los especuladores», en relación a las construcciones de lujo que se edifican en la Ciudad y que, en muchas oportunidades, no son habitadas por quienes las adquieren, convirtiéndose en resguardo de capacidades de ahorro de una pequeña parte de la sociedad que sólo cumple la función de encarecer el valor del suelo.
Frente estas intervenciones, Miguel respondió que en el predio se crearán «13 manzanas de parque» con locales comerciales y gastronómico, añadiendo que el «74 por ciento del predio será una plaza y solo el 26 por ciento estará destinado a construcciones».
La audiencia de este viernes surge de la sesión del 8 de octubre, cuando se aprobó la primera lectura de este proyecto del jefe de Gobierno para el desarrollo paisajístico y urbanístico en el denominado complejo “Costa Salguero – Punta Carrasco”.
En la oportunidad, la postura del oficialismo en el recinto fue expuesta por la diputada Victoria Roldán Méndez, presidenta de la comisión de Planeamiento Urbano, quien explicó que «con este proyecto queremos recuperar el acceso al río, se recuperan casi 14 hectáreas de espacios verdes que podrán disfrutar todos los vecinos y vecinas de la Ciudad en un predio que hoy no tiene accesibilidad. En total habrá 22 hectáreas de espacios públicos».
Desde la oposición, el diputado del (FdT) Matías Barroetaveña señaló que era evidente “la falta de interés público” que se desprendía de la iniciativa del Ejecutivo porteño.
Un dato llamativo de esa sesión parlamentaria ocurrió cuando el legislador de UCR-Evolución Martín Ocampo aseguró que el voto afirmativo de su bloque respondía a la necesidad de “habilitar la participación ciudadana”, en referencia a la audiencia pública de este viernes.
En el entendimiento de Ocampo, si no se hubiese aprobado la primera lectura, rechazando el proyecto del oficialismo, “estaríamos decidiendo sólo nosotros”, en referencia al cuerpo parlamentario.
De esta manera, con la convalidación, se “va a escuchar que opinan los vecinos, y de acuerdo a lo que opinen los vecinos, continuaremos con la segunda lectura de estos proyectos o no”, dijo el legislador radical en Vamos Juntos, y agregó que “si votamos en contra clausuramos la participación ciudadana”.
Para Jonatan Baldiviezo “el bloque UCR-Evolución es orgánico. Responden al senador Martín Lousteau. No hay pensamientos independientes”.
El abogado recordó el interesante dato de el bloque “no acompañó la Ley de Distrito Joven, asegurando que la costanera debía ser de acceso público”, y reconoció que “se tratan de excusas para ir avanzando de a poco, aunque no se esperaban una reacción de esta naturaleza”, en referencia a la gran convocatoria para la audiencia pública de este martes.
Es esta “reacción”, la que Jonatan Baldiviezo ponderó ante la AcMV y la calificó como “un logro de la organización y la consciencia participativa, no sólo por la venta de Costa Salguero sino también con un cansancio ciudadano a este plan sistemático de venta de tierras públicas, de privatización de servicios públicos y las constantes transferencias de recursos públicos a manos privadas”.
Saber si la movida que arranca este jueves resultará el parlante de las y los miles de manifestaciones de rechazo que se escucharán el viernes en la audiencia pública es la gran incógnita.
Se trata de un final abierto el saber si el bloque UCR-Evolución, o el propio Vamos Juntos, se hace eco de las voces que le dirán no al proyecto de Horacio Rodríeguez Larreta, llevando a la práctica que “nuestros jefes son los vecinos de la Ciudad y nadie más”, como mencionaba Felipe Miguel o si, por el contrario, se va a producir una “corto circuito entre la ciudadanía, que quiere recuperar el espacio público verde, y un gobierno que le responde al poder económico inmobiliario”, como mencionaba Jonatan Baldiviezo, si no se atiende el reclamo popular.
La audiencia pública es el mecanismo de consulta popular establecido para las leyes de doble lectura. Normas que luego de ser aprobadas en primera instancia habilitan el espacio de manifestación ciudadana no vinculante, para luego retornar al recinto buscando su sanción definitiva.
En este sentido, es necesario recalcar lo trabajoso que resulta ser parte de una audiencia pública se debe llenar un formulario, escanearlo, y enviarlo junto al propio Documento de Identidad, un trabajo que para muchas personas puede resultar complejo, más en momentos de pandemia.
Redacción AcMV