Piden que el Ejecutivo informe sobre la posible instalación de una Trump Tower

Piden que el Ejecutivo informe sobre la posible instalación de una Trump Tower

noviembre 28, 2016

La posibilidad de la instalación de un proyecto inmobiliario en la Ciudad de Buenos Aires, y pegado al Obelisco por parte de la firma de Donald Trump ya genera polémicas y sospechas. Exigen que el Ejecutivo informe sobre la existencia e implicancias del proyecto.

 

 

Según recientes revelaciones periodísticas, en la Ciudad de Buenos Aires se prepara el emplazamiento de una “Trump Tower”. La misma, según estas fuentes, estaría situada en las calles paralelas a la avenida 9 de Julio, y en la cercanía del Obelisco. Se trata de una torre de 35 pisos y 135 metros de altura, con pisos de 800 m2 de oficinas de lujo. La inversión prevista supera los 100 millones de dólares.

 

Marcelo Ramal presentó un Proyecto de Resolución por el que se exige al Poder Ejecutivo que informe, a través de los organismos correspondientes y dentro de los 30 de recibido el pedido, sobre algunos puntos relacionados con la construcción de la llamada “Trump Tower”.

 

De recibir la aprobación por parte de la Legislatura, el Jefe de Gobierno deberá informar la localización del terreno donde se prevé la construcción de la torre, la superficie que ocupa, la cantidad de pisos, su altura en metros y la zonificación en el Código de Planeamiento Urbano que actualmente tiene el predio. Asimismo, deberá notificar si se han otorgado permisos para habilitar la mencionada Torre; si existe en estudio o preparación una iniciativa legislativa para modificar la zonificación en el Código de Planeamiento Urbano; y si se encuentra en trámite el correspondiente Estudio de Impacto Ambiental.

 

Cabe señalar, sin embargo, que en toda la zona de la Av. 9 de Julio el Código de Planeamiento Urbano prevé la nomenclatura de edificación C1 que impone un límite de 38 metros de altura a las construcciones. Por lo tanto, sería necesaria una modificación de la zonificación para realizar la torre y por lo tanto, el paso del proyecto por la Legislatura Porteña.

 

En ese caso, el grupo empresario Trump debutaría en Buenos Aires con la comprar de un terreno con bajo permiso de edificación,y bajo valor económico, para proceder a su rezonificación posterior y lograr, por esa vía, una renta inmobiliaria extraordinaria.

 

A lo largo del año, según indica Marcelo Ramal en el texto de la iniciativa “el gobierno de la Ciudad ha intensificado la política de venta de tierras públicas a favor de megaproyectos inmobiliarios. Entre ellos, la venta de las tierras del Tiro Federal, de casi cuarenta hectáreas en el ex Parque de la Ciudad y las trece torres que IRSA proyecta en la Costanera Sur, levantando un muro de cemento en uno de los pocos pulmones de oxígeno con que cuenta la Ciudad”.

 

El legislador porteño de izquierda asegura que la posibilidad de un permiso especial para la erección de la Torre Trump“reviste una significación especial” por el hecho de que “la empresa desarrolladora pertenezca al futuro presidente norteamericano, por un lado, y de que esa construcción requiera de una medida excepcional por parte del Estado porteño, por el otro, coloca a esta operación inmobiliaria ante una grave sospecha” que según Ramal podría tratarse de un “episodio de tráfico de influencias a escala internacional”.