A lo largo de las últimas décadas, el servicio de remis se fue incrementando en todo el territorio de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, llegando incluso, en muchas ocasiones, a suplantar el transporte público o escolar. Sin embargo, la Legislatura Porteña pidió un informe sobre inspecciones realizadas a las Agencias de Remises, ante la desprotección a los pasajeros por los “autos truchos”.
El Código de Tránsito y Transporte de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, define al remis, como «Automóvil de alquiler no sujeto a itinerario predeterminado, con tarifa prefijada para el recorrido total, usado por ocupación total del vehículo, que no toma o deja pasajeros con boletos, billetes o pagos individuales».
“La presente iniciativa, pretende contar con información fidedigna acerca de esta problemática que pone en juego la integridad física e incluso la vida de nuestros conciudadanos, por lo que solicito a mis pares la aprobación de la misma”, sostiene Paula Oliveto Lago, autora del Proyecto de Resolución.
En el documento, la legisladora expone como argumento un artículo del diario Clarín del día 2 de Septiembre, que es sus páginas 42 y 43 publica un informe titulado «Pasajeros en peligro: no está en regla la mitad de las agencias de remises porteñas», en el que describe: «el gran problema es la desprotección de los pasajeros, porque los remises truchos no pasan por las verificaciones técnicas obligatorias ni tienen respaldo ante un reclamo legal, por ejemplo por un accidente».
También se hace referencia a que los datos surgen de un relevamiento realizado por la Subsecretaría de Tránsito y Transporte de la Ciudad en conjunto con la Agencia Gubernamental de Control, que avalan que durante 2014 se realizaron inspecciones en más de 570 agencias de CABA para controlar que se encontraran inscriptas en el Registro Único de Remises (RUREM).
“Del total, 192 agencias se hallaban en situación ilegal y fueron infraccionadas o intimadas. Otras 113 tenían algún problema con su habilitación, con lo cual se les dio un plazo para que se pusieran en regla. Tras esta recorrida, volvieron a 52 agencias, de las cuales 15 fueron clausuradas porque no habían cumplido nada, y además les iniciaron causas contravencionales por violación de clausura a otras 5 que habían sido cerradas pero siguieron trabajando”, resalta el artículo.
Lo más preocupante es que estos datos se parecen mucho a los resultados de un control realizado en los primeros meses de este año: sobre 291 agencias visitadas, el 53,6% no estaba en regla.En este marco, para la Lesgislatura “resulta preciso requerir informes sobre diversas cuestiones vinculadas al transporte de remises”, tales como la cantidad de inspecciones realizadas a las oficinas deautomóviles, cantidad de actas de Infracción confeccionadas con motivo de las inspecciones realizadas.
Asimismo, buscan saber la cantidadde agencias de vehículos clausuradas, cantidad de inspectores con los que se cuenta para efectuar el control de estas agencias, y la remisión del listado de sucursales inscriptas en el Registro Unico del Servicio de Alquiler de Automóviles Particulares con Conductor Remises, entre otros.
Por otro lado, haciendo foco en la cuestión emotiva, la funcionaria enfatiza que “lo más preciado que tenemos los que decidimos ser padres, habitualmente utilizan este tipo de servicio”, a la vez que remarca: “considerando que como en toda acción del tránsito vehicular, el valor custodiado es el de la integridad física y la vida de los pasajeros, nuestra obligación como legisladores es realizar todos los esfuerzos posibles para evitar situaciones que los comprometan”.