Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli, jefe de gobierno y vice de la Ciudad de Buenos Aires, presentaron los compromisos de gestión para lo que resta de su mandato. En la Comuna 10 anunciaron la construcción de un Cesac en Villa Luro, obra que ya había sido licitada y adjudicada en 2019, y una comisaría en Versalles, barrio que ya posee una y por la cual no hay muchas precisiones. Sin novedades sobre el tomógrafo para el Hospital Vélez Sarsfield, prometido desde al menos 2016, ni sobre el destino del ex predio Pepsi.
Escribe: Alejandro Volkind
Como es costumbre desde 2016, el jefe de Gobierno Horacio Rodriguez Larreta realizó el martes 23 un anuncio de compromisos de acá al 2023, es decir, cuando finalice su mandato.
Dentro de los 37 compromisos que asumió hay al menos dos que involucran directamente a la Comuna 10: la construcción de un Centro de Salud (CeSAC) en la calle Bacacay 5640 (Villa Luro), y la construcción de una comisaría en el barrio de Versalles.
Salud: Un CeSAC ya anunciado y un tomógrafo que sigue sin concretarse
En el caso del CeSAC, la obra ya había sido anunciada en 2019, año en el que fue licitada y adjudicada a la empresa JOSÉ LUIS TRIVIÑO S.A. por poco mas de 63 millones de pesos, pero hasta el momento se ha avanzado poco y nada. Durante 2020 solo se realizó la demolición y ahora comenzaría la ejecución de la obra. Respecto a su finalización, no hay mayores precisiones.
A su vez, según integrantes del Consejo Consultivo de la Comuna 10 que estuvieron en la presentación de los compromisos, el vice jefe de Gobierno Diego Santilli también anunció la construcción de otro CeSAC en la Comuna, aunque no dio precisiones de su ubicación.
El proyecto que quedó fuera de los Compromisos es el tomógrafo para el Hospital Vélez Sarsfield, anunciado desde al menos 2016 y prometido explícitamente en octubre de 2019.
Imagen. Adjudicación de la obra Nuevo Cesac. Año 2019
Seguridad: anuncios con pocas precisiones
En cuanto al ítem Seguridad, desde el gobierno anunciaron la construcción de una comisaría en Versalles, pero no indicaron la dirección exacta. El anunció generó desconcierto debido a que en el barrio ya se encuentra la Comisaría 10 B, en la calle Porcel de Peralta 726.
Silvia Fernández, integrante de la Comisión de Seguridad del Consejo Consultivo Comunal (CCC) aseguró que aún la propia Policía de la Ciudad no fue comunicada sobre si el edificio será una comisaría, un centro de monitoreo o una alcaldía.
Situación similar sucede con la construcción de la Comisaría ubicada en la calle Rafaela 4751, obra pronta a finalizar. Se supone que el nuevo edificio albergará a la Comisaría 10 C, que actualmente se encuentra en la Calle Basualdo 165, pero hasta el momento tampoco hay demasiadas precisiones, situación que motivó un pedido de informes desde la comisión de seguridad del CCC hacia la Junta Comunal 10.
Imagen. Mapa de las comisarías de la Comuna 10
Los compromisos y la democracia participativa en la Ciudad
Tal como plantean el abogado Jonatan Baldiviezo y la ingeniera María Eva Kuotsovitis, la política de compromisos impulsada por el jefe de Gobierno porteño, anula considerablemente los mecanismos democráticos que posee la Ciudad.
“Resulta muy llamativo que la prioridad quede reducida a la discrecionalidad del Jefe de Gobierno, cuando las prioridades, de acuerdo a la Constitución, deben ser definidas por la Legislatura mediante la aprobación de la ley de presupuesto y el resto de las leyes”.
Baldiviezo y Kuotsovitis advierten que los compromisos de Rodríguez Larreta no tienen ninguna correspondencia con la gran cantidad de mandatos legales dispuestos por la Legislatura.
“La ´gestión por compromisos´ demuestra displicencia hacia el órgano democrático por antonomasia y el desarrollo de una gestión sujeta a la voluntad unilateral del Jefe de Gobierno. Estos compromisos que no derivan del parlamento (Democracia Representativa) tampoco derivan de la participación ciudadana (Democracia Participativa)”, aseguran.
El BA Elige y la ficción de la consulta vecinal
Para conocer mejor como entiende el gobierno la participación ciudadana es interesante analizar la experiencia del BA Elige.
Entre 2017 y 2019 el gobierno de la Ciudad impulsó BA Elige, programa organizado por la Dirección General de Participación Ciudadana que buscaba que los vecinos sugieran y elijan propuestas para mejorar su comuna.
En la edición 2019, los vecinos de la Comuna 10 solicitaron comprar un tomógrafo y un resonador para el Hospital Vélez Sarsfield, crear un Polo educativo en el predio del ex centro de detención Rocca y un Centro Cultural en el predio ex Pepsi de Villa Real, entre otras necesidades.
Sin embargo, el Programa –que ese año contaba con un presupuesto de más de 30 millones de pesos- seleccionó como únicos ganadores a dos proyectos que se titulaban “Seguridad” y “Cámaras de seguridad”
“Propongo que se agreguen cámaras de seguridad en todo el barrio de floresta”, aseguraba el primer proyecto seleccionado. “Propongo que se incorporen cámaras de seguridad en la comuna 10, también personal de seguridad. También me gustaría que cada comuna tenga su centro de monitoreo así pueden actuar rápidamente ante un delito”, sugería el otro.
Lo mismo sucedió en la edición 2018.
El proyecto más votado por las y los vecinos fue la construcción de un jardín de infantes en Floresta. Sin embargo, el gobierno catalogó la propuesta de “inviable” y no pasó a la etapa final.
Ese año resultaron ganadoras 36 propuestas para la Comuna 10 pero las únicas que se concretaron hasta el momento son 12 iniciativas vinculadas a la instalación de cámaras de seguridad, algo que el propio gobierno de la Ciudad ya se había comprometido en 2017 como parte de sus objetivos de gobierno.
¿Democracia participativa?
Las situaciones planteadas dejan ver, como aseguran Baldiviezo y Kuotsovitis, que el entendimiento de Larreta de la Democracia Participativa se reduce, como lo expresó, a que la ciudadanía controle pasivamente si el Poder Ejecutivo cumple con los compromisos dispuestos y asumidos unilateralmente. “Las únicas obligaciones que tienen el Jefe de Gobierno -advierten- son las que él mismo se autoimpone”.
En esta extraña concepción de democracia participativa, las y los vecinos, parecen ser sólo convidados de piedra.