A un mes del comienzo de los trabajos, los vecinos del barrio aseguran que los canteros que están instalando no sirven para que los autos disminuyan la velocidad y advierten que las rejas de obra que colocaron en algunas esquinas disminuyen la visión y ya causaron accidentes. También afirman que algunas de las intervenciones realizadas generan dificultades para que micros escolares y autobombas puedan doblar en ciertas esquinas.
A un mes del reinicio de la Zona Calma, tras una inexplicable habilitación judicial –de la misma justicia que previamente y en dos instancias había rechazado la obra por no contar con el certificado de aptitud ambiental exigido- los vecinos de Villa Real están con bronca. Bronca porque los trabajos que se están realizando han dificultado el normal funcionamiento del barrio –rejas, conteiners, escombros-, y también porque muchas de las críticas que le habían al proyecto ya se están confirmando, fundamentalmente que los canteros instalados en las esquinas, la principal herramienta para que los automóviles disminuyan la velocidad y así evitar accidentes, no son eficaces para tal fin.
“Los canteros en las esquinas solo reducirán la velocidad de giro, no la recta. Nueva muestra: hoy por la tarde tremendo choque entre Moliere y Pedro Lozano. Uno de los autos subió a la vereda y rompió el frente de una casa. Era el que venía por Pedro Lozano hacia Irigoyen a alta velocidad, a pesar de que los canteros tienen vallas todavía!”, asegura una vecina que tomó imágenes del accidente.
“No nos vimos por la rejas”
Choque en Bauzá y Varela. “No nos vimos por la rejas” aseguran los automovilistas. Luego de las protestas, el gobierno sacó esas rejas pero volvió a colocar otras.
Intervenciones que disminuyen el paso
Foto que corresponde a Simbron entre Virgilio y Moliere. Esas puntas son las que salen de los canteros y se los están comiendo los autos. Por Ahí no pasa ni la autobomba ni los micros escolares”, aseguran los vecinos.
Calle Melincue, frente a la Plaza Terán, tras la última lluvia. “Esta zona jamás se inundaba”, aseguran los vecinos.
Canteros sí, tomógrafos no
«Están gastando millones de pesos e hacer canteros y florcitas, cuando el hospital Velez Sarsfield sigue sin sus refacciones, en una obra de mas de 160 millones de pesos, que nunca se llevó a cabo y figura como obra terminada. Se le ha pedido al gobierno mil veces que mandé un tomógrafo y no lo hizo. La escuela 17 de chicos diferenciales de Educación Especial sigue sin aparecer, las veredas son un desastre. Pero canteros, sí, y como estamos probando, esto no reduce la velocidad”, asegura María Inés, vecina del barrio.
Una obra fuertemente resistida por los vecinos de Villa Real
Además de la falta del certificado de aptitud ambiental de la obra, existen una importante cantidad de argumentos contra la instalación de la Zona Calma en Villa Real, ente los que se destacan: la ausencia de instancias participativas de los vecinos del polígono en el que se desarrolla la obra, ningún estudio social y ambiental que sustentara la decisión de construir una zona calma o que evaluara el impacto positivo o negativo que ella importaba.
A su vez, las vecinas amparantes aseguraron que las obras a efectuarse presentan los siguientes problemas:
a) no están bien proyectadas y dificultarán la movilidad de las ambulancias, los camiones de bomberos, de recolección de residuos y los vehículos de las fuerzas de seguridad, que no podrán maniobrar correctamente;
b) los canteros proyectados, por su ubicación, generarán bloqueos en el tránsito vehicular;
c) disminuirá la cantidad de espacios de estacionamiento en la vía pública, por lo que los habitantes tendrán que trasladarse mayores distancias caminando de noche a sus hogares en una zona que sufre de inseguridad;
d) el trazado de ciclovías y la instalación de chicanas dificultará el ascenso y descenso de los niños que concurren al Club Atlético Social y Deportivo Camioneros;
e) no se consideró que casi el 50% de la superficie a intervenir es Distrito AE26 – “Vías de ancho reducido” que tienen protección especial por ser ámbitos de significación ambiental en los términos de la ley 4738.