A un año de la muerte de Hanna | Pasear un perro y no morir en el intento

A un año de la muerte de Hanna | Pasear un perro y no morir en el intento

enero 30, 2021

Es 30 de enero y se cumple un año de ese paseo fatal por la plaza de Monte Castro.

 

 

Escribe: Juan Guardia

 

 

No sabemos si el lector recuerda lo ocurrido, no sabemos si se olvidó o si nunca se enteró, pero la realidad es que Patricia y Karina estaban paseando a sus perros cuando Hanna, la perra de Karina, pisó barro -producto del riego excesivo que se realizaba en la plaza- que estaba a metros de un poste de luz que tenía una fuga eléctrica y por lo tanto, el agua actuó como conductora y toda esa zona quedó electrificada. Cuando Patricia y Karina, sin entender qué le estaba sucediendo, quisieron ayudar a Hanna, ambas se electrocutaron. Karina logró despegarse pero Patricia no logró pisar tierra seca y la descarga le detuvo el corazón. Murió y resucitó gracias a la Reanimación Cardiopulmonar (RCP) que en seguida le realizó Julieta, otra vecina de 19 años que también se encontraba paseando perros en la plaza y se acercó al ver lo que sucedía.

 

Paso un año y no logramos traer ninguna certeza, no logramos saber quién o quienes, personas físicas o empresas, fueron los responsables de este hecho. Sabemos que desde el Gobierno de La ciudad Autónoma de Buenos Aires se propone el olvido, el silencio y la impunidad.

 

Ni Justicia para Hanna, ni seguridad para los/as vecinos/as, de la plaza Monte Castro. Horacio Rodriguez Larreta una vez se refirió al caso y hablo de “un caso aislado”. Karina se preguntaba ¿si le hubiera pasado a un familiar, opinaría que es un caso aislado? Patricia afirmaba que para el jefe de gobierno, “solo somos números, y que una perra casi que no cuenta.”

 

La suerte estuvo del lado de Patricia, poniendo a Julieta cerca que le practico maniobras de RCP, salvándole la vida. Ojala la próxima vez nos cuide el estado y no la suerte.

 

 

Imagen. Karina y Patricia, sobrevivientes de la descarga eléctrica del 30 de enero. «Este lugar era mi segunda casa y terminó siendo un lugar de muerte”, aseguran.

 

 

 

 

Nos quedan muchos interrogantes, a un año nos seguimos preguntando:
¿Por qué al día de la fecha no se esclareció lo sucedido?
¿Por qué el riego sigue siendo abundante?
¿Por qué el presidente de la junta Comunal N°10 Mauro Pedone no se refirió nunca a este hecho ni tomo medidas suficientes?
¿Por qué las empresas todavía no entregaron los planos de luz y agua?
¿En el día de la fecha hay disyuntor?
¿Alguien nos podría garantizar que no va a volver a suceder algo así?
¿Qué nos enseñó lo sucedido?
Sería bueno poder brindar las respuestas a estas preguntas, pero por más que intentamos no las conseguimos, ojala nadie más tenga que pasar por esto, porque como cuentan las protagonistas para ellas fue un suceso que las marcó.
(Lease https://nadienosinvito.com.ar/yo-mori-por-negligencia…/)
Es necesario tener memoria para no tropezar dos veces con el mismo poste de luz, con el mismo riego, es importante saber porque nos pasan las cosas que nos pasan, es imperioso poder diferenciar un accidente de algo evitable, porque si hay negligencia y/o inoperancia es imprescindible corregir. Porque nuestras vidas valen y porque tenemos derechos a pasear seguros.
A un año de lo ocurrido en La Plaza Monte Castro y a la memoria de Hanna.