El local ubicado en Carrasco al 200 amaneció el viernes con esvásticas pintadas y con vidrios rotos. Desde el PS contextualizaron el episodio en la escalada de acciones violentas contra organizaciones populares que son legitimadas por el propio gobierno, y convocaron a vecinos y organizaciones del barrio a acompañarlos en el reclamo por esclarecer el ataque.
El local que el Partido Socialista mantiene abierto en Floresta, donde se impulsan iniciativas culturales y de economía popular, fue agredido el viernes 16 de febrero. La sede, ubicada en Carrasco al 200. amaneció con inscripciones neo-nazis y con vidrios rotos.El ataque se dio en el momento en que volvían a iniciarse las actividades en el barrio.
“Nosotros impulsamos una red de comercio justo y compras comunitarias, tenemos iniciativas culturales pensadas para todo el año y justo en el momento en que volvemos a tener actividad viene este ataque”, señaló Maximiliano Díaz, uno de los responsables del local, quien aseguró que los daños causados complican el funcionamiento en el lugar.
Pese a que hasta el momento ningún grupo se atribuyó la autoría de la agresión, las sospechas recaen sobre integrantes de Bandera Vecinal, partido de abierta simpatía nazi, quien tiene un local a dos cuadras de donde se produjo el ataque. “No queremos acusar gratuitamente pero da que pensar”, asegura Díaz, quien ya realizó la denuncia policial correspondiente.
El huevo de la serpiente
Desde el Partido Socialista afirmaron que el ataque se da en un contexto de “exacerbación de las actitudes violentas y represivas que han sido sufridos en el último tiempo diferentes organizaciones políticas, sindicales, culturales en distintos puntos del país” y advirtieron la responsabilidad del gobierno.
“El discurso del Gobierno Nacional de estigmatización de las organizaciones políticas, así como la liviandad con la que toma los diferentes hechos de este calibre no hace más que alentar el accionar de estos grupos que actúan en el anonimato”, aseguraron a través de un comunicado. En ese contexto, desde el PS convocaron a rechazar estas actitudes violentas e intolerantes “que degradan nuestra convivencia en la diversidad”.
“Estamos preocupados- asegura Maximiliano Díaz-. Por eso queremos darle la mayor difusión al hecho y convocamos a los vecinos y a las organizaciones del barrio a que nos acompañen en el reclamo”.
