La posible construcción de edificios de 70 metros en las principales avenidas de la Comuna y el colapso de los servicios públicos, la desprotección que sufre el Área de Protección Histórica de Floresta y sus construcciones patrimoniales, el descontrol en la zona comercial de av Avellaneda, y el posible cambio de alturas en el Barrio San Pedro y en el de Las Mil Casitas fueron algunos de los temas que plantearon los comuneros en su reunión con el Secretario de Desarrollo Urbano de la Ciudad de Buenos Aires en el marco de la modificación del Código Urbanístico que está realizando el gobierno porteño.
Escribe: Alejandro Volkind
El jueves 31 de octubre, los siete miembros de la Junta Comunal 10, acompañados de vecinas y vecinos integrantes del Consejo Consultivo Comunal se reunieron con el Secretario de Desarrollo Urbano de la Ciudad de Buenos Aires Álvaro García Resta para plantearle los temas prioritarios a tener en cuenta en el ajuste al Código Urbanístico que está realizando el gobierno de la Ciudad.
La reunión fue convocada por el GCBA tras el reclamo de juntistas, asociaciones vecinales y vecinos organizados, quienes exigieron dar su punto de vista y ser tenidos en cuenta en la discusión, tal como indica la Constitución de la Ciudad.
“Esta reunión llegó muy tarde porque en realidad se realizó después de la votación en primera lectura”, expresó a NNI la juntista Daniela Romero.
El encuentro sirvió para que vecinos y representantes de la Comuna pudieran expresar las principales preocupaciones y necesidades vinculadas a la planificación urbana de los seis barrios de la Comuna 10.
Dentro de los temas planteados estuvieron:
Imagen. La necesidad de límites y regulación a la zona comercial sobre av Avellaneda fue uno de los temas conversados.
Área de Protección Histórica (APH) de Floresta y límites a la Zona comercial sobre av Avellaneda
La APH 53 Floresta son 18 manzanas que conservan las primeras edificaciones del barrio de Floresta. Por un lado se exigió que se avance con los edificios antiguos que no están catalogados y protegidos, ya que se empezaron a modificar al punto tal que al lado de una casa del año 1900 tenés un taller clandestino o tenés un galpón para mercadería. “Estamos pidiendo -explica Romero- que en esa área específica haya solamente dos locales comerciales por cuadra, y que esos locales sean regulados. También lo que se pidió es que no haya ahí ni talleres ni absolutamente nada que tenga que ver con la confección ni con comercio mayorista».
«Y además, algo específico que era un punto que se retiró del código urbanístico anterior sobre la demolición de edificios no sujetos a protección. Pedimos que los que no tienen protección que no los puedan demoler salvo que tengan el permiso y la aprobación de la obra nueva porque sino ¿qué pasaba? Los tiraban abajo y como después no le daban los permisos, hay un montón de lugares que quedan baldíos y que están vacíos en este momento”, indicó la juntista.
Imagen. En la Comuna 10 hay al menos 142 casas antiguas que deben ser protegidas
Torres en Avenida Rivadavia, Juan B Justo y Alberdi
Después lo que hablamos es de una nueva incorporación que se hace al código urbanístico que es la capacidad constructiva adicional, que implica que si vos construís en alguna parte sur de la ciudad, te regalan metros cuadrados por fuera de lo permitido en otras zonas de la Ciudad.
Ver Edificios de 70 metros sobre Rivadavia
«En nuestros barrios la Avenida Alberdi, la avenida Juan B justo y la avenida Rivadavia tenían capacidad receptiva, o sea que nosotros podríamos llegar a tener edificios de más de la altura permitida, porque seríamos los barrios que regalarían esos metros para hacer una capacidad constructiva adicional», advierte Romero.
«No estamos de acuerdo con la capacidad constructiva porque ya con la altura que tenemos en la actualidad nosotros tenemos un montón de problemas: corte de luz, falta de agua. No es que estamos en contra del progreso sino que estamos en contra de una falta de planificación, porque si al día de hoy nosotros ya tenemos corte de luz, imagínate si además de lo permitido pueden hacer hasta cuatro o cinco pisos de más”, se pregunta la juntista.
Imagen. Miranda al 4700. Casas bajas en venta y avance de grandes edificios. Pese a limitar las construcciones en los barrios de casas bajas, una vez que esté aprobado el Código Urbanístico, van a seguir construyéndose edificios con la normativa vieja, es decir, con mayor altura a la nueva fijada legalmente.
¿Barrios de casa bajas con alturas más altas?
Otro de los temas abordados fue la creación de los USAB 0 que impulsa el Gobierno porteño. En el Código Urbanístico de la Ciudad de Buenos Aires, las Unidades de Sostenibilidad de Altura Baja (U.S.A.B.) son áreas de la ciudad con alturas menores que se destinan principalmente a actividades residenciales. Respecto a los esta novedad, Romero aseguró que “es un engaño porque los USAB 0 pasan a ser la antigua USAB 1, y ahora casi toda nuestra comuna, pasa a ser USAB 1, lo cual haría que todas las casas aumenten la posibilidad de construcción tres metros más, con lo cual en cualquiera de nuestros barrios, mínimamente va a poder construir cuatro pisos”.
Barrio San Pedro y Barrio de las Mil Casitas
En la reunión se expresó la preocupación por la suba de las alturas de construcción permitidas en todos los barrios de la Comuna 10, tras la creación de la USAB 0. “Yo pregunté específicamente sobre los barrios de San Pedro y las Mil casitas y los pasajes, y me dijeron que pasaban a ser USAB 0 pero que no se modificaban para nada o sea, quedaban igual que antes entonces no modificaban la identidad barrial de esos barrios en particular”, indicó la juntista Karina Ammannato a este medio.
Imagen. Torres y colapso de los servicios. En el verano 2023 hubo 32 cortes de luz en 90 días en los barrios de Monte Castro y Versalles.
¿Cuando se aprobarían estas modificaciones al Código Urbanistico?
El proyecto del gobierno ya tiene una votación favorable en primera instancia. En estos días se esta realizando la Audiencia Pública obligatoria, en la cual se anotaron mas de 1700 ciudadanos para dar su punto de vista sobre la modificación al CUr, y donde abrumadoramente se están señalando críticas y faltantes al proyecto oficial.
Luego, segun el procedimiento legal, el gobierno debería tomar nota de lo señalado en la Audiencia y modificar en el proyecto en los aspectos que fueron señalados, aunque esto no suele suceder. Por ultimo, el proyecto vuelve a la legislatura donde debe ser aprobado nuevamente, en este caso, en segunda lectura.
Las alarmas, señala Daniela Romero, están puestas acá, ya que aspectos muy controvertidos del proyecto original que el gobierno aceptó dar de baja para su aprobación en primer lectura, ahora podrían volver a ser incorporados.
La capacidad constructiva adicional podría ser uno de ellos.
«Ellos nos dicen que la primer lectura sacaron todos los ejes de capacidad constructiva adicional». Mi pregunta fue ¿qué nos garantiza a nosotros que en la segunda lectura no lo vuelvan a incorporar? Ahí es cuando García Resta, Secretario de Desarrollo Urbano de la Ciudad de Buenos Aires, dijo «sí, en algún momento del tratamiento las vamos a tener que volver a agregar», advirtió la juntista.