En el Día de la Bandera decidimos recorrer y recordar la vida del prócer a través del museo que surgió como una iniciativa privada del Dr. Ricardo Vitiritti y que hoy día es uno de los orgullos de Villa Luro.
Hay deseos individuales que están inevitablemente unidos a proyectos colectivos. El caso de Manuel Belgrano, su proyecto político, su acción revolucionaria al frente del primer gobierno patrio, es uno de ellos.
Salvando las distancias, el Museo Manuel Belgrano, puede ser otro ejemplo en la misma dirección. Iniciativa individual de su creador y propietario, el Dr. Vitiritti, desde el inicio fue pensado como una forma de que el barrio y todo aquel que lo desee pueda conocer y pensarnos como sociedad al calor de las reflexiones y de la vida de Belgrano.
Según relata él mismo, el proyecto surgió a los 14 años y se materializó gracias al conocimiento y a la pericia de este profesor de historia que ganó dos veces concursos de preguntas y respuestas.
Lo sorprendente es que, ya con el premio en la mano, Don Ricardo decidió invertirlo en un proyecto colectivo como es un Museo.
Así, con paciencia, con algo de dinero y con mucha solidaridad de vecinos y hasta familiares lejanos del propio Manuel Belgrano, el Dr Vitiritti fue llenando las cinco salas de la casa que ocupa en Sarachaga al 4900 con más de 1700 objetos entre los que se destacan una de las primera medallas argentinas acuñadas después de la Declaración de la Independencia Argentina en el Congreso de Tucumán, un sello de lacre que usó en el Consulado; nueve documentos con su fama original; una silla colonial de cuero repujado que Belgrano había obsequiado al mariscal Arenales y la reja de la casa que habitó en Luján.
El Museo también cuenta con una frondosa biblioteca a disposición de todo aquel que desee adentrarse en la vida de un hombre cuyo pensamiento y acción sigue marcando un camino para todos aquellos que piensan y quieren una argentina soberana e igualitaria.
“Se han elevado entre los hombres dos clases muy distintas; la una dispone de los frutos de la tierra, la otra es llamada solamente a ayudar por su trabajo la reproducción anual de estos frutos y riquezas o a desplegar su industria para ofrecer a los propietarios comodidades y objetos de lujo en cambio de lo que les sobra. (…) Existe una lucha continua entre diversos contratantes: pero como ellos no son de una fuerza igual, los unos se someten invariablemente a las leyes impuestas por los otros. Los socorros que la clase de propietarios saca del trabajo de los hombres sin propiedad, le parecen tan necesarios como el suelo mismo que poseen; pero favorecida por la concurrencia, y por la urgencia de sus necesidades, viene a hacerse el árbitro del precio de sus salarios, y mientras que esta recompensa es proporcionada a las necesidades diarias de una vida frugal, ninguna insurrección combinada viene a turbar el ejercicio de una semejante autoridad. El imperio de la propiedad es el que reduce a la mayor parte de los hombres a lo más estrechamente necesario” (Palabras que el General Manuel Belgrano escribió en La Gazeta, el 1 de septiembre de 1813)
Todos aquellos que deseen visitar el museo, que forma parte del Circuito Histórico de la Comuna 10, deben concertar una visita telefónicamente (4671-6464) con su propietario y curador el Dr. Ricardo Vitiritti quien los guiará y explicará ampliamente los contenidos.