Exigen mayores controles en los comedores escolares de la Ciudad

Exigen mayores controles en los comedores escolares de la Ciudad

septiembre 25, 2015

Luego de que niños que concurren a la escuela N 4 Distrito Escolar 8 ubicada en Barco Del Centenera 747 debieron ser hospitalizados a causa de ingerir agua con lavandina e inhalar gas a raíz de una combustión producida por el uso de un químico a determinar, el bloque legislativo del Frente Para la Victoria presentó un proyecto de resolución “sobre las falencias observadas en el servicio de comedores escolares de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.”

 

 

 

 

 

El Programa de Alimentación Escolar, junto a un equipo especializado, brinda servicios alimentarios a los alumnos de las escuelas que dependen del GCBA. En la elaboración de los menúes se contempla: población destinataria, aspectos nutricionales, hábitos alimentarios y aspectos bromatológicos que aseguran una alimentación saludable. Dichos menúes se ajustan a los requerimientos establecidos en la Ley N° 3.704.

 

El Programa abarca a todos los niveles educativos: maternal, inicial, primaria, especial, media, adultos, superior, no formal, artística y programas extracurriculares. No sólo se realiza durante el período escolar, también llega a jardines maternales de funcionamiento permanente y programas especiales de vacaciones de verano e invierno.

 

“No se trata de poner en discusión un programa que impacta favorablemente en la ciudadanía, sino de revisar los dispositivos de contralor en virtud de que más de 40 alumnos/alumnas de escuelas primarias padecieron en el último año intoxicación, en el marco de políticas públicas que promuevan el cuidado integral de la niñez”, manifestó Gabriel Fucks, que presentó el proyecto.

 

El Pliego de Bases y Condiciones que regula el servicio de desayuno, merienda, refrigerio, vianda establece en los capítulos IV y VI la obligatoriedad de la empresa concesionaria de contratar personal competente para el cometido y capacitarlo, como así también. indicaciones de la forma en que se debe llevar adelante la limpieza de las instalaciones del comedor, prohibiendo taxativamente el uso de productos no habilitados por organismos competentes.

 

Asimismo, el  Ministerio de Educación cuenta con personal técnico asignado a la fiscalización del contrato vigente. Sin embargo, en los últimos meses, varios nenes fueron internados luego de consumir agua con lavandina, mientras que otros inhalaron gas. Ambas situaciones se produjeron en el ámbito del comedor escolar en los horarios de almuerzo  y desayuno respectivamente.

 

En este sentido, estos hechos tienen antecedentes: en el mes de  junio, al menos ocho niños, alumnos de 1º y 2º grado de la escuela pública N°16 Distrito Escolar 17, ubicada en Apolinario Figueroa 661, barrio porteño de Villa Crespo, debieron ser atendidos en el Hospital Ricardo Gutiérrez luego de haberse intoxicado con cebos de veneno para ratas que se encontraban en el espacio del comedor escolar.

 

En dicho caso, el subsecretario de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Carlos Regazzoni, aseguró que fue una «negligencia» de la empresa de fumigación el haber olvidado los cebos de veneno en la escuela, y añadió que «acá hay una responsabilidad clara porque estos procedimientos están perfectamente pautados y esto no debería haber pasado de ninguna manera».

 

Mientras que los maestros enfatizaron: «De no ser por el accionar de los docentes que intervinieron inmediatamente la situación pudo haber sido aún más grave». UTE le exigió al gobierno porteño «que se ocupe y preocupe por garantizar las condiciones dignas de enseñar y aprender en todas las escuelas porteñas».