Desde el 2014 se realizaron obras al "Expreso de la Alegría", el tren turístico del Barrio de Parque Avellaneda. Sin embargo, no se incluyó en la toma de decisiones a la Mesa de Trabajo y Consenso (MTC) del Parque "Presidente Dr. Nicolás Avellaneda", ni se brindó información correspondiente a la empresa contratada, los detalles técnicos de las obras, los montos y los plazos de ejecución.
El «Expreso de la Alegría» es una bien histórico y cultural identitario del barrio y para sus vecinos, motivo de encuentro familiar, de disfrute intergeneracional, medio de disfrute del espacio público y conexión con la naturaleza. Con respecto a la participación vecinal, mediante la Ley Nº 1153 se declara al Parque Avellaneda como «una unidad ambiental y de gestión contenida en el espacio público así denominado”.
Además, manifiesta que está conformada por un patrimonio natural, cultural y social que incluye los ámbitos físicos integrados por el espacio verde, los viveros, la Casona de los Olivera, el Polideportivo, el Tambo, el Frigorífico, la Cremería y la Casa de la Reconquista, y se reconoce la organización social e institucional que se viene desarrollando en forma continua en dicho espacio, mediante prácticas consolidadas de gestión asociada que promocionan la participación ciudadana corresponsable en la planificación y el manejo del espacio público.» (Artículo 1°)
El Parque Avellaneda tiene esta jerarquización normativa, pero los recursos y la voluntad política recaen en el Poder Ejecutivo de la Ciudad, siendo este mismo, el que debe instrumentar los mecanismos políticos y económicos para la pronta puesta en funcionamiento del expreso. De esta manera, se encarga de las empresas contratadas para la obra, el monto adjudicado y los importes abonados a las empresas hasta la fecha, las pruebas de funcionamiento efectuadas.
Con respecto al valor histórico, cultural e identitario, las siguientes líneas del libro “Parque Avellaneda: Rieles de Patrimonio” del Ministerio de Culura de la Ciudad de Buenos Aires son claras: «El Trenlos llevará a transitar la vida pública del parque en su ambiente natural, cultural, social e histórico. La Casona, el Jardín de la Meditación, el Antiguo Natatorio, la Calesita, el Tambo y la gran variedad de árboles, arbustos y aves, serán sólo algunas de las estaciones obligadas para la recreación visual y la interacción con el entorno verde”
“El reconocimiento del pasado, la valorización del presente y la planificación del futuro en el marco de la asociación del gobierno con los vecinos en la Mesa de Trabajo y Consenso, permitirá que el Tren mantenga su carácter de histórico, augurando un porvenir de alegrías y de encuentros para las próximas generaciones.», expresa el texto.
A pesar de la valoración conceptual compartida tanto por los organismos del Gobierno y los vecinos del barrio, el tren se encuentra parado desde el año 2005, con intermitentes anuncios de reactivación, y en condiciones de funcionamiento.Es por esto, que vecinos y agrupaciones del territorio solicitan información con respecto a la reparación y puesta en valor del tren.
Entre los puntos de interés de los residentes se encuentran: Los plazos de obra, la fecha de comienzo de ejecución y la fecha de finalización de las tareas, cuál será el personal a cargo (funciones, experiencia y capacitación), días y horarios de funcionamiento, plan de emergencias, Reglas de Funcionamiento y Normas de Seguridad, a fin de que una vez iniciado el servicio no sea interrumpido por causas evitables.